No a todas las amas de casa les gusta molestarse en preparar rollitos de col, y la razón suele radicar en las hojas de col.
Entonces, ¿por qué no nos habla de un método probado con el que puede desmontar rápida y fácilmente el repollo para hacer rollitos de repollo?
Y para ello necesitará un congelador muy común, que sin duda se puede encontrar en cualquier cocina.
Primero debes cortar el tallo de la col.
Transfiere la preparación resultante a una bolsa y asegúrate de que el repollo esté completamente cerrado.
Ahora puede enviar la col con seguridad a uno de los compartimentos del congelador.
El repollo tierno se debe dejar en el congelador durante 24 horas, el repollo duro viejo durante 2-3 días.
Para que el repollo tenga tiempo de descongelarse conviene sacarlo del congelador con unas horas de antelación, o mejor aún, durante la noche. Cuando se descongele, las hojas quedarán suaves y maleables, por lo que no tendrás dificultades para seguir preparando rollitos de repollo.