Es difícil encontrar un plato caliente más sencillo y rápido de preparar que los huevos revueltos.
Los huevos fritos son un desayuno popular por esta misma razón.
Pero mucha gente quiere que freír un huevo sea un proceso aún más rápido.
Y ese deseo es bastante comprensible: por la mañana, antes del inicio de la jornada laboral, suele haber muy poco tiempo.
Por tanto, tenemos que darnos prisa y simplificar la preparación de un plato de por sí sencillo.
Simplemente no intentes aumentar el fuego de la estufa: los huevos revueltos pueden quemarse, pero las claras seguirán líquidas.
Necesitamos actuar de manera diferente. Es decir, utilizar la sal correctamente.
Tan pronto como el cocinero rompe el huevo en la sartén, inmediatamente debes agregar sal a la clara transparente restante.
Además, se debe hacer hincapié en la parte que se encuentra al lado de la yema.
Los bordes de los huevos fritos se pueden dejar sin sal. Tampoco es necesario salar la parte amarilla del plato.
Pero si la parte necesaria de la proteína se cubre con cloruro de sodio, los huevos revueltos se cocinarán muy rápidamente.
Y los bordes de la proteína tendrán tiempo de freírse normalmente sin aditivos.