El trigo sarraceno es una guarnición sabrosa y saludable que combina bien con verduras y productos cárnicos.
Es difícil estropear el producto durante la cocción, lo que significa que incluso un principiante en la cocina podrá preparar gachas.
Pero es fácil exagerar con la sal. No hay necesidad de desesperarse.
El problema se puede corregir fácilmente sirviendo una guarnición deliciosa y aromática para el almuerzo o la cena.
La primera opción pasa por aumentar la dosis de papilla. Basta con hervir un poco más de trigo sarraceno, pero sin sal, y luego mezclar ambas masas en una cacerola.
El segundo método consiste en remojar el cereal. Para hacer esto, vierta agua hirviendo sobre la papilla terminada durante 2-3 minutos, luego escurra el agua y sazone la papilla con mantequilla.
Hay otro método. Sugiere que transfieras el cereal a un colador y lo enjuagues con agua corriente. Luego se debe cocinar un poco el plato a fuego lento con mantequilla y luego se puede servir el trigo sarraceno.