No se recomienda colocar los guisantes en una olla sin antes remojarlos, ya que quedarán duros.
También vale la pena considerar que las legumbres sin un tratamiento previo adecuado ejercerán demasiada presión sobre los órganos digestivos, creando un malestar notable.
Por lo tanto, las amas de casa experimentadas siempre intentan poner el producto en agua durante la noche. Pero se trata de un procedimiento muy largo que me gustaría acelerar si es posible.
Generalmente se utiliza agua fría. Algunos usan líquido caliente. Pero ambos métodos no permiten influir significativamente en el tiempo de cocción.
Por eso, conviene recordar un sencillo truco.
Para hacer esto, debe verter solo una cucharada de refresco en un recipiente con agua a cualquier temperatura. Los guisantes deben permanecer en este líquido sólo 60 minutos.
Después de esto, las legumbres se reducirán muy rápidamente a un puré.
Algunas amas de casa prescinden de ningún tratamiento previo: enjuagan el producto y añaden refresco durante el proceso de cocción. Este método muestra muy buenos resultados.