Muchas ensaladas clásicas no se pueden preparar sin remolacha, ya que el tubérculo es uno de los componentes importantes.
Muy a menudo, las amas de casa prefieren cocinar verduras.
Pero este método tiene un inconveniente: durante el proceso de cocción, la remolacha pierde parte de su sabor y vitaminas.
Por tanto, existe otro método para preparar tubérculos para ensalada.
Lo mejor es hornear verduras en el horno. Su sabor será muy brillante, lo que mejorará la calidad de la ensalada. Pero esto debe hacerse correctamente, ya que existe un alto riesgo de que el cultivo de raíces se seque.
Si las remolachas son lo suficientemente grandes, sería más prudente pelarlas y dividirlas en cubos medianos. De lo contrario, el tubérculo simplemente no se horneará.
Simplemente puedes lavar bien la verdura en miniatura con el lado duro de la esponja y luego secarla un poco.
Luego metemos las remolachas al horno. Sin embargo, no olvide cubrir el tubérculo con papel de aluminio: es gracias a esto que el producto quedará jugoso y sabroso.
Lo mejor es hornear las remolachas a 190 grados. El tiempo de cocción es de aproximadamente 60 minutos. Sin embargo, es mejor revisar las remolachas con un palillo: en algunos casos, es necesario hornearlas por más tiempo.