Los chebureks atraen a mucha gente por su interesante masa fina combinada con un relleno de carne jugoso y aromático.
Gracias a esta combinación, el plato rápidamente ganó popularidad entre los amantes de los snacks.
Sin embargo, no siempre es posible darle al relleno el grado requerido de jugosidad.
Algunas amas de casa cometen un error común: agregan más caldo del que requiere la receta. Como resultado, las empanadas pueden “abrirse” justo durante el proceso de fritura.
Resulta que el secreto del relleno increíblemente jugoso es bastante simple. Para que el plato se derrita en la boca, se recomienda añadir un cubo de mantequilla a cada relleno de cheburek.
Esto no solo hará que el relleno sea jugoso, sino que también mejorará significativamente su sabor.
Muchos chefs utilizan el mismo truco a la hora de preparar chuletas: basta con “esconder” un cubo de mantequilla en el medio de cada chuleta. Se cree que cualquier plato que contenga carne picada se beneficiará de la introducción de mantequilla.
Por lo tanto, este método se puede utilizar de forma segura al preparar platos de carne.