El pescado de río tiene un gran número de adeptos porque este producto es asequible, saludable y sabroso.
Sin embargo, en algunos casos, muchas amas de casa se niegan a cocinarlo, ya que el plato terminado tiene un regusto desagradable a barro.
Pero vale la pena recordar que una preparación adecuada del producto ayudará a eliminar este inconveniente.
En primer lugar, cabe señalar que el pescado de río revela mejor su sabor cuando se fríe, por lo que este es el método de cocción que debes elegir.
El pescado se limpia, se lava y se divide a fondo en porciones.
A continuación conviene recordar un truco con el que las amas de casa experimentadas se deshacen del desagradable sabor del barro.
En un tazón grande, combine un vaso de leche con media cucharada pequeña de sal. Coloca el pescado en la mezcla preparada durante un cuarto de hora.
Esto no solo ayudará a mejorar el sabor del producto, sino que también permitirá que el pescado mantenga su forma durante la fritura. Se cree que la pulpa sigue siendo sabrosa y de alta calidad después del tratamiento térmico.
Después del "baño de leche", es necesario secar el pescado y comenzar a freírlo.