La carne, el pescado, las setas e incluso las verduras sabrán mejor rebozados y preparados con sencillos trucos.
Sólo con ver la masa dorada y esponjosa se despertará un apetito bestial.
El método se basa en la preparación de masa de galleta. La receta de masa puede ser cualquier cosa. Es importante seguir sólo una regla.
Se muele la yema con sal y se bate la clara hasta los primeros picos. Los componentes se introducen en la pieza de trabajo por separado.
La leche se mezcla con agua carbonatada en una proporción de 3:1. Esto produce una de las masas más ligeras y casi ingrávidas. Los refrescos se pueden sustituir por cerveza. Así se preparan, por ejemplo, gambas, pescado y aros de cebolla.
En lugar de leche, tome kéfir. Se agrega harina dependiendo de la consistencia deseada. Luego sal, pimienta, bate los huevos y agrega la soda apagada con vinagre. El ácido del kéfir no será suficiente, por eso los cocineros usan vinagre.
Las amas de casa recomiendan apagar la soda en la propia preparación. Dicen que así la masa queda lo más esponjosa posible.