Si por alguna razón no desea cocinar chuletas con huevos, existen muchas formas de ayudarle a hacerlo.
Algunos productos no añaden este componente en absoluto.
Para que las chuletas no se deshagan durante el proceso de cocción, simplemente baten bien la carne picada.
Pero puedes hacerlo de otra manera.
Tome una cucharada "generosa" de avena (copos) y prepárela con tres cucharadas de agua hirviendo. Después de 7 a 10 minutos, la masa de avena debería aumentar de tamaño y hincharse.
Después de eso, se debe agregar el aditivo de avena a la composición principal de la carne picada y mezclar hasta que quede suave.
Estas chuletas definitivamente podrán resistir el tratamiento térmico y conservar su forma. Gracias a la avena, el plato de carne quedará suave, esponjoso y literalmente se derretirá en la boca.
La avena también ayuda a retener los jugos de la carne dentro de la chuleta.
Si no tienes avena a mano, puedes hacer chuletas aún más interesantes. Para ello necesitarás coger unos 50 gramos de queso duro, picarlo con un rallador y añadirlo al resto de ingredientes.