Para mejorar el sabor y la calidad de las chuletas, las amas de casa a menudo pueden introducir componentes bastante inusuales en la carne picada.
Por ejemplo, en ocasiones se pueden encontrar referencias a la introducción de almidón.
Se agregan huevos de gallina para que la carne picada mantenga su forma y no se desmorone durante el tratamiento térmico. Sin embargo, muchos han notado que los huevos de gallina endurecen las chuletas.
Si simplemente agrega almidón, esto ayudará a combinar los ingredientes de la carne picada en un solo todo y eliminará la dureza del plato terminado.
A muchas amas de casa les gusta cocinar más chuletas para tener siempre a mano un delicioso plato de carne. Pero esto no siempre produce el resultado deseado, ya que durante el almacenamiento las chuletas se vuelven mucho más duras.
Pero el uso de almidón permite que las chuletas se mantengan suaves y sabrosas incluso después de un almacenamiento prolongado.
Agregar almidón puede ser un truco útil para ti, porque sin mucho esfuerzo el plato quedará más suave, sabroso y jugoso.
Por ejemplo, no todo el mundo sabe que el almidón evita que el jugo de la carne se escape durante la fritura.
Es importante añadir el almidón correctamente, ya que una cantidad insuficiente no dará los resultados deseados y un exceso empeorará el sabor del plato de carne. Por tanto, por kilogramo de carne conviene tomar de seis a ocho cucharadas grandes del producto.