Para muchas amas de casa, las patatas hervidas son la solución ideal, ya que esa guarnición siempre será apropiada.
Las patatas hervidas equilibran perfectamente el pescado salado o ahumado y también complementarán la carne frita con pollo o verduras.
Sin embargo, es necesario cocinarlo correctamente para que la verdura quede quebradiza y aromática.
Muchas amas de casa olvidan que la sal puede endurecer demasiado las patatas, lo que las hace no tan apetecibles. Será difícil disfrutar de una guarnición sólida.
Por tanto, cocine las patatas sin utilizar sal.
Obviamente, los tubérculos de diferentes formas y pesos no pueden estar listos al mismo tiempo. Para evitar esta situación, conviene cocinar aproximadamente los mismos tubérculos.
El sabor de las patatas hervidas puede verse influido positivamente añadiendo hierbas, especias, hierbas y otras verduras durante la cocción.
Puedes elegir según tu gusto. A algunas personas les gusta el tubérculo hervido con romero, pimienta de Jamaica y laurel. Alguien introduce tallos de eneldo con perejil, zanahorias y cebollas. Algunas personas sazonan sus patatas con mejorana, cúrcuma y curry. Simplemente encuentra la combinación perfecta.
Si cocinas patatas a fuego alto, el resultado puede decepcionarte. Como muchos otros platos, las patatas hervidas reaccionan mal al tratamiento térmico activo.
Por lo tanto, lo mejor es reducir el fuego a medio después de hervir.
Si desea que la guarnición quede perfecta, debe preparar un aderezo de alta calidad. Para ello, derretir la mantequilla, sofreír los ajos, mezclar con sal y hierbas picadas. Será imposible resistirse a esas patatas.