A muchas personas les gusta darse un capricho con un plato delicioso: el pescado frito.
Sin embargo, durante el proceso de cocción puede ocurrir una situación desagradable: la harina se pega a la sartén.
Esto no sólo estropea el componente visual del plato, sino que también puede empeorar el sabor.
La respuesta a esta pregunta es simple y obvia: es extremadamente difícil distribuir uniformemente la cantidad requerida de harina sobre la superficie del pescado. Por lo tanto, la capa de empanizado resulta demasiado densa o casi invisible.
Este enfoque no añade sabor ni calidad al plato.
Existe un método muy sencillo que utilizan muchas amas de casa. Para hacer esto, deberá determinar la cantidad requerida de harina y sal, mezclar los ingredientes y verterlos en una bolsa normal.
Luego enviamos el pescado, atamos la bolsa y empezamos a agitar el contenido. Como resultado, el producto necesita exactamente tanta harina como sea necesario. Después de esta manipulación, puedes empezar a freír de forma segura.