Los cocineros novatos se enfrentan a un problema: el pescado rebozado se quema por fuera, pero permanece crudo por dentro.
Esto se debe a un error típico que toda ama de casa comete al menos una vez. Está relacionado con el tamaño del filete.
De esto depende no solo el aspecto apetitoso del plato, sino también su jugosidad. Los chefs experimentados recomiendan hornear trozos grandes en el horno, después de freírlos.
Los chefs recomiendan freír rodajas finas rebozadas en una sartén. De esta forma la carne quedará frita por dentro y no quemada por fuera.
Antes de tirar los trozos a la sartén, es necesario calentar los platos con aceite. De esta forma la masa se “agarre” inmediatamente sin tener tiempo de extenderse por la superficie.
Los cocineros recomiendan utilizar más aceite para freír. Gracias a esto, no quedarán zonas crudas en el filete. Luego, antes de servir, puedes colocar los trozos sobre una toalla de papel para eliminar el exceso de aceite.