Con el enfoque adecuado, las gachas de mijo pueden convertirse en la mejor opción para un desayuno saludable debido a su sabor equilibrado.
Sin embargo, a veces el plato tiene un amargor notable, lo que estropea toda la impresión del cereal.
Debido a la especial composición química del mijo, la aparición de amargor es una reacción natural del producto al contacto con el oxígeno. Por lo tanto, las amas de casa experimentadas nunca cocinarán gachas de mijo sin un tratamiento previo adecuado.
Debido a la naturaleza de su producción, un paquete de cereal de mijo puede contener partículas de otras plantas o incluso sus semillas. Por lo tanto, antes de preparar directamente el cereal, el producto debe clasificarse cuidadosamente.
El amargor es a menudo una indicación de que el mijo se almacenó incorrectamente. Los cereales, por ejemplo, no toleran bien el contacto con el agua, por lo que aparece un regusto desagradable.
Por lo tanto, trate de garantizar un almacenamiento adecuado del producto.
Al preparar mijo para cocinar, algunas amas de casa fríen previamente el cereal. Pero hay que tener cuidado: si dejas el mijo en una sartén puede aparecer un sabor no tan agradable.
Si el producto se quema hasta las paredes de la sartén, siempre aparece amargor. Por lo tanto, trate de controlar el proceso de cocción y agregue la cantidad adecuada de agua.
Para una ración de cereal, es necesario tomar tres porciones de líquido.