Cualquier cocinero en la cocina puede tener una situación desagradable asociada con los alimentos quemados.
Por ejemplo, si no añade suficiente agua, el trigo sarraceno podría quemarse durante la cocción.
Algunas personas se enojan y tiran la papilla estropeada.
Las amas de casa experimentadas creen que con el debido esfuerzo, la mayor parte del plato se puede "reanimar". Para ello, deje la parte quemada en la sartén y transfiera el resto del trigo sarraceno a un recipiente limpio.
Sin embargo, el problema es que incluso esta parte del trigo sarraceno tendrá un olor y un sabor desagradables que es necesario eliminar.
El trigo sarraceno se debe colocar en una pequeña cantidad de agua y volver a ponerlo en la estufa. Es mejor elegir fuego lento. También puede agregar especias y hierbas aromáticas durante el proceso de cocción.
Como regla general, después de esto nadie notará que el trigo sarraceno está quemado.
Si preparas salsa, no será difícil conservar el trigo sarraceno. Debe preparar cualquier salsa aromática, agregar trigo sarraceno a la sartén, cocinar a fuego lento durante un par de minutos y servir.
Algunas amas de casa eliminan los olores desagradables "mecánicamente". Para ello, basta con enjuagar la papilla bajo un chorro de agua fría durante unos minutos.