Los chefs experimentados recomiendan evitar este aditivo al preparar el primer plato.
Esto se debe al hecho de que el borscht adquirirá un aroma "químico".
Muchas amas de casa quieren ahorrar tiempo y hacer que el plato sea más sabroso y rico. Existe el deseo de agregar un cubo de caldo al borscht.
Para muchos, una solución sencilla es disolver las especias secas en agua hirviendo. Ya sólo queda preparar la remolacha y las patatas.
Pero los cocineros experimentados explicaron que la especia sólo daña el plato. La sopa adquiere un sabor "químico".
El problema es el glutamato monosódico, que se encuentra en muchos caldos artificiales. El potenciador del sabor y la sal no crean la combinación más exitosa y el agua no se satura más.
Si no dispone de tiempo suficiente, los chefs recomiendan cocinar borscht en caldo de verduras normal. O dividir la preparación en varios días. Por ejemplo, el fin de semana, hierva la carne y luego congele el líquido en recipientes pequeños.