El dieciséis de diciembre, los cristianos ortodoxos recuerdan al obispo Juan el Silencioso.
El monje recibió este apodo por una razón: permaneció en silencio durante cuatro décadas.
Hoy vale la pena prestar atención no solo al calendario ortodoxo, sino también al popular.
Este último menciona varios signos interesantes.
Señales meteorológicas para el 16 de diciembre
Según las leyendas, las condiciones climáticas actuales pueden ayudarte a comprender cómo será el verano el próximo año.
Si la nieve en Iván el Silencioso es húmeda y densa, entonces el período estival será lluvioso, según el cartel.
Pero los copos blancos esponjosos y secos prometen un verano seco.
La ausencia total o casi total de nieve el 16 de diciembre advierte, según los indicios, de una mala cosecha el próximo año.
La aparición de un camachuelo debajo de la ventana puede indicar un calentamiento inminente. Lo mismo, según la leyenda, se evidencia con zumbidos en los oídos el 16 de diciembre.
Pero el crepitar de la leña en la estufa promete una fuerte caída de la temperatura del aire en un futuro próximo.