Ayer por la mañana hubo una llamarada del nivel más alto del Sol.
Inicialmente se informó que las masas expulsadas no tendrían ningún impacto en nuestro planeta.
Sin embargo, más tarde se supo de las previsiones ajustadas.
Resultó que todavía son posibles las tormentas magnéticas.
Es posible que la eyección de plasma solar que se produjo durante la llamarada de ayer impacte la Tierra.
Así lo informó TASS en referencia a dos instituciones pertenecientes a la Academia de Ciencias de Rusia.
Posibles consecuencias del brote del 24 de octubre
Inicialmente se informó que la llamarada de clase X que se produjo ayer por la mañana en el borde oriental del Sol no tendría consecuencias graves.
Se observó que la eyección de masa “se fue de lado” alejándose de la Tierra
Pero han surgido nuevos datos que indican que la eyección aún puede tocar nuestro planeta con su borde.
Como resultado, pueden hacerse sentir tormentas magnéticas.
Inicialmente, el nivel de riesgos geomagnéticos era casi nulo. Sin embargo, después de que se dispuso de nueva información, el pronóstico se ajustó. Los riesgos han aumentado considerablemente.
Por el momento, los riesgos máximos se han fijado provisionalmente para el mediodía del sábado, cita TASS en un mensaje del Laboratorio de Astronomía Solar.
En otras palabras, las personas sensibles al clima deberían estar preparadas para ciertas dificultades el 26 de octubre.