Lavar ventanas es lo que más tiempo le quita a las amas de casa. Una serie de dificultades que hay que afrontar en el proceso obligan a lavar bien los cristales para no volver a esta actividad durante varios meses.
Pero para algunos, este es un trabajo que les permite no solo ganarse la vida.
El británico Terry Burrows, que trabajó como limpiador de ventanas y estableció un récord mundial, pensó algo como esto.
En el Libro Guinness de los Récords ostenta el título oficial de limpiacristales más rápido.
El hombre estableció su récord el 9 de octubre de 2009.
En sólo 10 segundos arregló tres ventanas de oficina estándar.
Al mismo tiempo, Terry no utilizó ningún medio técnico especial ni trucos, solo equipo profesional y experiencia personal.
El récord se estableció después de que el británico lavara tres vasos de oficina estándar.
Cada uno mide 114,3 por 114,3 cm. Todos fueron insertados en el marco de una ventana.
La lavadora utilizó una fregona de 300 mm de ancho y 9 litros de agua.
Terry completó la tarea en sólo 9,14 segundos.
Demostró sus habilidades en un concurso local de limpieza de ventanas en Blackpool, Reino Unido.