El toro llamado Romeo, que vive en Oregón, EE.UU., tiene sólo seis años.
Una edad tan joven, según los estándares humanos, no le impidió convertirse en una estrella en el Libro Guinness de los Récords: en sus páginas Romeo figura como el toro más alto del mundo.
La altura del animal supera los seis pies (aproximadamente 1,94 metros).
Es triste darse cuenta, pero si no fuera por los dueños del refugio en Oregón, Misty y Robert Moore, el poseedor del récord tal vez no hubiera existido: cuando el toro tenía solo 10 semanas, estas personas lo salvaron del sacrificio.
En el refugio, el animal fue rodeado de abrazos y amor, y el toro se apresuró a devolverle el favor. Incluso recibió su nombre por su profunda capacidad de amar.
Según el dueño, Romeo está encantado con los abrazos, pero tiene mucho miedo cuando empieza a llover fuera de la ventana.
Misty también dijo que mantener un gigante así les cuesta un buen centavo.
Y no es de extrañar: un toro come 100 libras de heno y 15 libras de grano al día, y para saciar su sed necesita beber un baño completo de agua.
El toro no rechaza las golosinas: le encantan las manzanas y los plátanos. Sin embargo, la mujer está segura de que todos los gastos valen la pena cuando ve lo feliz que está Romeo.
