Manta, o diablo marino gigante, es el nombre de una especie de mantarraya cuyo tamaño es increíblemente grande.
Pueden alcanzar entre 7 y 8 metros de ancho y, a veces, su peso es de 2 a 3 toneladas.
No es de extrañar que estas criaturas, debido a su enorme tamaño, necesiten mucha comida: peces pequeños y plancton.
Los dientes dispuestos en 16 filas ayudan a obtener alimento.
Sin embargo, la gente no tiene nada que temer: las mantarrayas utilizan sus incisivos para filtrar eficazmente el zooplancton.
El peligro de la mantarraya proviene de su inexplicable afición a saltar: cuando esta criatura gigante salta del agua y luego vuelve a caer, el sonido del impacto se puede oír a varios kilómetros de distancia.
Teniendo en cuenta que con un ligero aleteo de sus “alas” este pez puede herir gravemente a una persona, cabe imaginar lo que le sucederá a un espectador que se encuentre junto a una mantarraya, dejándose llevar por sus insólitos saltos.
Al miedo se suman unos crecimientos inusuales en la parte delantera de la cabeza, que recuerdan un poco a los cuernos; probablemente por eso estos gigantes recibieron su segundo apodo: demonios marinos, que mencionamos al principio.
Anteriormente hablamos de qué gato es considerado el más popular del mundo.
