Un bulldog llamado Otto de la ciudad de Lima, Perú, apareció en las páginas del Libro Guinness de los Récords allá por 2015.
Oficialmente, su logro es “El túnel humano más largo atravesado por un perro en patineta”.
Como habrás adivinado, Otto, andando en patineta, logró deslizarse entre las piernas abiertas de 30 personas. Como exige el Libro, todos los participantes permanecían mirando en la misma dirección, con las piernas bien abiertas, para que el bulldog pudiera pasar libremente sin golpear a nadie.
Una gran multitud se reunió para ver a Otto establecer el récord, y el vídeo del logro del perro fue visto por millones de personas de diferentes partes del planeta. Entonces el perro a la edad de tres años se hizo mundialmente famoso.
Los dueños de Otto, Luciana Viale y Robert Rickards, dijeron que se les ocurrió la idea del perro después de ver un video de Tillman, el perro más rápido en patineta, que lamentablemente falleció en 2015.
Pronto, el adorable cachorro comenzó a realizar todo tipo de trucos, a surfear, a jugar al fútbol y, por supuesto, a andar en patineta.
Un día, mientras Luciana y Otto jugaban juntos, vio a su perro correr hacia ella en una patineta tan rápido que tuvo que abrir las piernas para que él pudiera pasar sin golpearla.
Así fue como a la niña se le ocurrió por primera vez la idea de intentar establecer un récord utilizando un túnel humano.
