Muy a menudo, los jardineros, ya sea por costumbre o por falta de experiencia, comienzan a sembrar con el procedimiento estándar: remojar las semillas.
Intentemos averiguar qué semillas no se deben remojar y por qué. No hay muchos y, por tanto, no será difícil recordarlos.
En primer lugar, se recubren las semillas.
Los fabricantes modernos de estos productos están intentando por todos los medios captar la atención de los jardineros y para ello utilizan una variedad de trucos. Por ejemplo, las semillas se tratan con compuestos especiales que promueven una mejor germinación, mejoran el crecimiento y desarrollo de las plántulas y protegen contra enfermedades. Al remojar dicha semilla, solo dañará el resultado futuro.
En segundo lugar, si las semillas germinan rápidamente.
No tiene ningún sentido remojar las semillas de rábanos y rábanos, nabos y otros. No hay nada malo que decir aquí, pero este procedimiento es extremadamente inútil y requiere mucho tiempo libre. Simplemente plántelos a tiempo y en suelo normal, y estos cultivos brotarán por sí solos sin ningún problema.
Tercero, semillas pequeñas.
No intente remojar las pequeñas semillas de petunia y lobelia, apio y acedera, así como fresas y otros cultivos. Esto no se puede hacer porque lo más probable es que las semillas se pierdan, sin mencionar las dificultades para plantarlas cuando están mojadas.