¿Llegas periódicamente tarde a algo?
¡Entonces asegúrese de recordar una frase sencilla!
Te ayudará a mantener relaciones normales con compañeros, jefes, clientes, amigos, pareja...

En general, con todas las personas que puedan sentirse ofendidas o enojadas contigo por tu falta de puntualidad.
Hay una línea que hace maravillas: te permite calmar instantáneamente a una persona que no está contenta con tu tardanza.
Qué hacer si llegas tarde
Algunas personas impuntuales no ponen excusas para llegar tarde.
Ésta es la táctica equivocada. Asegúrate de decir algo, de lo contrario los demás pensarán que no los respetas y se sentirán culpables.
Mucha gente actúa así: se apresuran a disculparse por llegar tarde.
Este enfoque, por extraño que parezca, también es incorrecto.
No te disculpes por llegar más tarde de lo esperado.
Mejor utiliza un interesante truco psicológico: en lugar de disculparte, utiliza... la gratitud y los elogios.
En otras palabras, en lugar de decir “Perdón por llegar tarde”, es mejor decir algo como esto: “Gracias por la larga espera” o “Gracias por tu paciencia y comprensión”.
Este enfoque te permite simultáneamente liberarte de la culpa (o mejor dicho, fingir que llegar tarde es algo completamente normal y cotidiano) y felicitar a tu interlocutor (de hecho, decirle: “Tienes paciencia” o “Sabes cómo hacerlo”). esperar").
Curiosamente, este truco tan sencillo funciona en la gran mayoría de los casos.