Si ha elegido un código PIN como forma de proteger su teléfono, tenemos que decepcionarlo: esta no es la opción más confiable.
Es bastante fácil seleccionar una combinación de números y, en consecuencia, piratear el dispositivo.
Pero no podrá realizar ese truco con la biometría; debido a que es mucho más difícil evitarlo, la protección biométrica es mucho más preferible.
El teléfono inteligente analiza las características del comportamiento del propietario y crea su retrato digital.
Gracias a esto, puede resistir eficazmente los intentos de cualquier persona de obtener acceso no autorizado a los datos del usuario.
La seguridad biométrica tiene otra ventaja que es su rápido funcionamiento.
Todo lo que el propietario del dispositivo debe hacer es mirar la pantalla o mantener presionada la huella digital. Esto será seguido inmediatamente por iniciar sesión en el sistema.
Por cierto, la biometría se está implementando no sólo en los teléfonos, sino también en otros dispositivos: paneles de control de acceso, cámaras CCTV, etc.
Si alguno de ellos es robado o perdido, los atacantes seguirán sin tener acceso a tus datos gracias a la protección biométrica.
Y una última cosa: los expertos coinciden en que los datos biométricos son más difíciles de falsificar que las contraseñas, lo que nuevamente reduce el riesgo de piratería.