A nadie le gusta que lo critiquen.
Además, a veces las críticas resultan injustas.
¿Qué debes hacer si tu jefe, cliente, socio, amigo o familiar empieza a “regañarte”?
La respuesta es simple: necesitas reflejar lo negativo. Y en sentido literal.
Es necesario conseguir que el “crítico” le vea la cara. Entonces se volverá menos agresivo.
Cómo reflejar la negatividad
Basta con sentarse en un lugar adecuado: donde haya un espejo.
La superficie reflectante debe estar detrás de usted.
En este caso, te resultará muy difícil criticar.
La razón es simple: el interlocutor verá su propio reflejo.
Debe prestar atención a su rostro, distorsionado por la ira.
Por supuesto, se sentirá incómodo. Para deshacerse del sentimiento negativo, se calmará.
Una persona se verá obligada a "reducir" la ira para que su expresión facial sea neutral.
Su contraparte se volverá menos emocional: no habrá gritos ni insultos.
Quizás habrá críticas, pero el interlocutor las expresará de la forma más correcta.