El tubing se está convirtiendo en una forma cada vez más popular de recreación invernal.
No es de extrañar: las “cheesecakes” son fáciles de utilizar y brindan la oportunidad de obtener una dosis de adrenalina.
Para que esquiar sea cómodo y conveniente, vale la pena visitar pistas especialmente equipadas en estaciones y parques.

Y, por supuesto, hay que elegir el tubo adecuado. Cómo hacer esto: lea a continuación.
Lo principal a tener en cuenta a la hora de comprar es la edad y la altura del “usuario”.
Por lo tanto, si se trata de un niño menor de 5 años, es necesario elegir entre modelos con un diámetro de 65 a 80 cm. Estos tubos pueden soportar un peso de hasta 60 kg.
Para niños de 7 a 14 años, cuya altura no supere los 140 cm y cuyo peso no supere los 80 kg, es adecuado un tubo con un diámetro de 80-100 cm.
Los adolescentes de hasta 160 cm de altura deben viajar en "tubos" con un diámetro de 95-100 cm. El peso máximo del usuario es de 85 kg.
Si se trata de adultos de hasta 175 cm de altura, el diámetro de la tubería debe ser de 110-115 cm. Estos modelos pueden soportar un peso de hasta 120 kg.
Por último, para adultos de entre 175 y 200 cm de altura, merece la pena buscar tubos de 120-150 cm. Según indican los fabricantes, también son aptas para viajar con un niño.
En cuanto al precio, si te consideras un principiante y no planeas usar tubos con demasiada frecuencia, un modelo económico será suficiente.
Para un uso frecuente se necesitan los mismos tubos que pertenecen a los segmentos de precio medio y alto: tienen un fondo más duradero, costuras reforzadas y asas suaves.