El fenómeno en el que no recordamos lo que nos pasó en los primeros años de nuestra vida se llama “amnesia infantil”.
Los debates científicos sobre este tema se llevan a cabo desde hace mucho tiempo, y en ellos participan tanto psicólogos como neurocientíficos.
En este sentido, se proponen como explicaciones de este fenómeno teorías tanto del campo de la psicología como del psicoanálisis y del estudio de los procesos cerebrales.
Así, Sigmund Freud consideraba la amnesia infantil como una forma de defensa psicológica que protege al individuo de recuerdos traumáticos de manifestaciones tempranas de la sexualidad.
Algunos científicos apoyan a Freud en que la amnesia es una barrera psicológica, pero no comparten su opinión sobre el papel de la sexualidad.
Creen que la memoria bloquea los recuerdos del encuentro de una criatura indefensa con la realidad desconocida y potencialmente peligrosa de los primeros años de vida.
A su vez, los neurocientíficos defienden una teoría diferente. Según ella, la razón es la rápida neurogénesis en el hipocampo del bebé.
Experimentos recientes en ratones han demostrado que la neurogénesis acelerada perjudica la capacidad de recordar de los animales. Sin embargo, aún no está claro si este enfoque se puede aplicar a los humanos.