Una persona puede recibir un regalo no sólo de alguien a quien ama o con quien tiene una actitud buena (o al menos neutral).
A veces, un regalo lo da un enemigo o simplemente alguien que no evoca emociones positivas.
¿En qué circunstancias podría suceder esto? Por ejemplo, durante una celebración de cumpleaños en el trabajo, cuando todos los compañeros deben “distinguirse”.
¿Qué debes hacer si te conviertes en dueño de algo que te regaló una persona que claramente te resulta desagradable?
Según la sabiduría popular, no conviene dejar ese regalo.
Que hacer con el regalo
El artículo debe eliminarse lo antes posible. Se cree que de lo contrario el héroe de la ocasión se enfrentará a problemas.
Esto sucederá porque el regalo del enemigo está “cargado”, según las señales, de energía negativa.
Si es posible, el regalo debe desecharse. Y es aconsejable hacerlo de tal forma que nadie se dé cuenta de que se ha deshecho del artículo.
la mejor manera
Sin embargo, existe una opción más interesante. Por lo tanto, un regalo de una persona desagradable no se puede enviar a un vertedero, sino que se puede volver a regalar.
Sí, volver a regalar regalos es, según la creencia popular, una mala decisión. Pero no en esta situación.
Al dar un regalo de un enemigo, "adherirás" el objeto y te protegerás de la energía negativa. Al menos eso es lo que dicen las señales.