Casi todos los padres quieren que sus hijos crezcan y se conviertan en un miembro exitoso de la sociedad, independiente y capaz de ganar mucho dinero.
Y también para que sepa manejar el dinero con prudencia. Para poder permitirse equipos caros, viajes interesantes y mucho más.
Pero para que todo esto suceda no basta con el deseo por sí solo. Necesitamos enseñar a nuestros hijos cómo administrar el dinero desde la infancia.
Entonces, ¿cómo puedes enseñarle a tu hijo a administrar el dinero sabiamente?
Consejo 1. Explíquele a su hijo en un idioma que comprenda el valor del dinero.
Consejo 2. Dígale a su hijo en qué se gasta el salario de sus padres. Cuánto se gasta en comida, cuánto en alquiler, en ropa, entretenimiento, etc. Esto se puede ilustrar a los niños pequeños con dibujos y monedas dibujadas. Por ejemplo, hay siete monedas en total. Es necesario dividirlos en imágenes con comida, apartamentos, ropa, excursiones al parque, juguetes.
En esta situación, los niños no tienen la sensación de que sus padres estén gastando dinero sólo en ellos mismos.
Consejo 3. Dé a los niños pequeñas cantidades de dinero de bolsillo. Y deje que el niño decida cómo gastar este dinero. Al principio, es razonable seguir interesado en en qué se gastó el dinero y decirle a su hijo cuál es la mejor manera de administrar su pequeño presupuesto.
Consejo 4. A medida que el niño crece, se puede aumentar la cantidad asignada para gastos de bolsillo. Y al mismo tiempo, confiar al adolescente más libertad en la gestión de sus finanzas.
Consejo 5. Enséñele a su hijo a llevar un registro de sus gastos e ingresos.
Consejo 6. Dígale a su hijo cómo planificar sus gastos para que pueda ahorrar algo de dinero para compras grandes.
Consejo 7. Cuando se vaya de viaje de vacaciones, déle a su hijo una determinada cantidad de dinero. Al mismo tiempo, acuerde que él mismo administrará el dinero. Podrá gastarlo en entretenimiento, golosinas o souvenirs, pero no pedirá más. Cuando le dé dinero a su hijo, prohíba las palabras "comprar" y "querer".
Consejo 8. Al repartir dinero de bolsillo, recuerde actuar con moderación. Porque si satisfaces todos los deseos inmediatos del niño y lo mimas demasiado, entonces no podrá sentir el valor del dinero. Y, en consecuencia, no puedes aprender a valorar ni el dinero en sí, ni las cosas compradas con él, ni el trabajo de tus padres.