Todos los padres deben ser conscientes de que hay varios casos en los que un niño necesita un suplemento de agua.
1. Es muy importante complementar la nutrición de su bebé si está completamente alimentado con biberón.
2. Por separado, cabe destacar el uso de una mezcla antirreflujo.
3. Otro motivo para ofrecerle agua a su hijo con más frecuencia es la tendencia al estreñimiento y los problemas para defecar.
4. La siguiente situación, cuando el bebé necesita agua, surge inmediatamente después de la introducción de alimentos complementarios, ya que hasta ese momento el bebé recibía exclusivamente leche materna o fórmula, y ahora la comida se ha vuelto menos líquida, lo que significa que la falta de líquido debe ser compensado.
5. Asegúrese de compensar la pérdida de agua que se produce en caso de enfermedad: vómitos, diarrea, fiebre, etc.
6. Por último, si la habitación donde se encuentra el niño tiene un nivel de humedad bajo (inferior al 35%) y hace calor afuera, también conviene asegurarse de que el niño beba una cantidad suficiente de líquido.
En cuanto a la cantidad de agua que debe darle a su hijo, por supuesto, es mejor consultar con su pediatra.
La ingesta diaria de agua es aproximadamente el volumen de una toma y depende de la edad; puede ser de 120-150-180 ml. Darle agua poco a poco a lo largo del día.