Si su bebé tiene un año o incluso más y todavía no puede masticar alimentos sólidos, los escupe y se ahoga, esto significa que su reflejo de masticación no está completamente formado.
En lugar de estresarse por esto, intente tomar algunas medidas para resolver este problema.
Si está preparando sopa, conviértala en un puré espeso mezclándolo en una licuadora. Al mismo tiempo dejar pequeños trozos en el plato. Con el tiempo, será necesario aumentar el número de estas piezas.
Tu siguiente paso es picar con un tenedor.
En este caso, las piezas serán de mayor tamaño, pero seguirán siendo suaves, eliminando el riesgo de que el bebé se ahogue con ellas.
Para despertar el interés de su hijo por los alimentos densos y la masticación, incluya en la dieta de su bebé alimentos que le gusten.
Estos suelen incluir plátanos, galletas pequeñas, manzanas y peras asadas, etc.
Y recuerde: si los niños se niegan a comer un alimento nuevo, no hay necesidad de forzarlos, simplemente ofrézcaselo en otro momento cuando tengan hambre.
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