Si tienes hijos en edad escolar, probablemente hayan intentado más de una vez convencerte para que les hagas los deberes.
Bajo ninguna circunstancia debes ceder a tales súplicas: es un gran error.
Por qué no deberías hacer los deberes de tu hijo
Esto enseña irresponsabilidad.
Los niños empiezan a comprender que sus responsabilidades no son tan importantes si siempre pueden delegarlas en alguien. Por tanto, tratarán todas sus tareas exactamente de la misma manera.
Claramente este no es el camino que lleva a una persona al éxito, dicen los expertos .
La lección no servirá de nada.
No olvide que la tarea es un paso importante para consolidar el material cubierto. Si lo evitas, nunca obtendrás el conocimiento completo.
No hay nada bueno en esto.
Incluso si hablamos de escribir, dibujar o completar un mapa esquematizado, la regla es la misma: el niño no podrá dominar la información que necesita y no adquirirá las habilidades necesarias.
El niño debe afrontar sus propias dificultades.
A los niños hay que enseñarles una rutina diaria desde una edad temprana. De esta manera, siempre tendrán el tiempo que necesitan para completar sus tareas.
Puede que tengas que sacrificar los juegos de ordenador o salir con amigos, pero es mejor aprender a priorizar desde pequeño.
Anteriormente hablamos de por qué los padres sobreestiman el talento de sus hijos .