Las mamás y los papás primero deben explicar por qué el escolar necesita hacer la tarea.
Si no sabe por qué se sienta frente a sus cuadernos todos los días, definitivamente no tendrá motivación.
Al comunicarse, no debe levantar la voz, pero debe responder las preguntas de manera similar y con calma.
A continuación, debe observar cómo el niño completa las tareas. Es necesario tener en cuenta su carácter, temperamento, así como su capacidad para concentrarse en las tareas.
Si surgen dificultades con esto último, se deben preparar ejercicios adicionales que le ayudarán a centrar mejor su atención en las tareas.
Al mismo tiempo, no debe apresurar a su hijo cuando haga la tarea. Esto sólo puede generar estrés adicional y afectar negativamente la calidad de su comprensión del material.
Puedes intentar enseñarle técnicas de gestión del tiempo para distribuir las lecciones por día de la semana. Al mismo tiempo, no es necesario sobrecargar al bebé. Es importante que tenga al menos una tarde completamente libre de clases.
También debemos enseñar al niño a planificar adecuadamente el tiempo con el ejemplo. Además, no olvides que a veces necesita pistas, ya que los niños suelen estar distraídos.
El espacio de trabajo debe ser cómodo, no debe haber distracciones.
También vale la pena agregar que no se debe rechazar la ayuda. Esto no significa que deba hacer todo completamente por el bebé. Basta con explicar el tema con más detalle y ayudarle a comprenderlo con ejemplos.
Anteriormente hablamos de cómo ayudar a un niño a superar la timidez.