Al diseñar una cama para su tan esperado bebé, los padres suelen comprar un colchón duro, una manta suave y una almohada cómoda.
Al mismo tiempo, ni siquiera piensan si los recién nacidos necesitan una almohada de este tipo.
Sin embargo, los ortopedistas y pediatras dicen que un bebé recién nacido sano no necesita almohada para dormir.
La razón son las características anatómicas de la estructura corporal del niño: su cabeza es más grande que el ancho de sus hombros, por lo tanto, cuando el niño se acuesta de lado, su oreja toca el colchón y su cuello está en la posición correcta y uniforme.
Importante: Si bien los expertos no recomiendan el uso de una almohada para bebé en la cuna, las almohadas especiales pueden resultar útiles al pasear o alimentar al bebé.
Pero volvamos a la almohada para dormir.
Los médicos no recomiendan usar una almohada antes de los dos años, ya que el niño puede chocar accidentalmente con ella y asfixiarse. Alternativamente puedes usar:
- pañal doblado. Se dobla un paño suave, como franela o muselina, y se coloca debajo de la cabeza del bebé;
- enrollar de una toalla. Se coloca debajo del colchón para que el niño pueda dormir cómodamente.
Anteriormente hablamos del papel que juegan los cuentos de hadas en la vida de un niño.