Los niños pequeños no siempre son capaces de controlar sus emociones.
Un niño puede hacer un berrinche en cualquier lugar por el motivo más insignificante.
A veces los padres ni siquiera pueden entender por qué el niño grita y llora.
En tal situación, mamá y papá deben averiguar qué quiere el bebé y ofrecerle su ayuda.
No vale la pena regañar a un niño, amenazarlo con un castigo y exigirle que deje de derramar lágrimas.
Pero necesitas decir las dos frases siguientes.
“Estamos listos para escucharte. Por favor, explica con calma lo que pasó".
Lo primero que hay que hacer es hacerle entender al niño que nadie le va a castigar.
Demuestre voluntad de escuchar a su hijo o hija.
A continuación, debe pedirle cortésmente al niño que se calme y le explique la esencia del problema.
“El problema se puede resolver juntos. ¡Déjanos ayudarte!
¿Ha quedado claro el motivo de la histeria? Luego hay que convencer al niño de que la dificultad se puede solucionar por completo.
Muéstrele a su hijo que no piensa dejarlo solo con el problema.
Apoye moralmente a su hijo. Y si es posible, ofrece ayuda directa.
Anteriormente, enumeramos frases que los padres no deberían decir si su hijo obtuvo una mala nota en la escuela.