Incluso los padres bastante ricos pueden "programar" a sus hijos para que sean pobres diciéndoles constantemente determinadas frases.
Te contamos lo que los padres no deben decirle a sus hijos para no condenarlos a la pobreza.
"Sin dinero"
El niño pensará que sin dinero es imposible conseguir lo que quiere.
Explícale siempre detalladamente a tu hijo por qué no puedes comprarle lo que quiere en este momento.
Si dices sin explicación alguna que no hay dinero y luego en la tienda llenas una canasta llena de alimentos, el niño no entenderá por qué lo rechazas.
"No hemos vivido en abundancia, no hay nada con qué empezar"
Con esta frase estás “programando” al niño para un mal futuro, sugiriendo que la pobreza en tu familia es una tradición.
“Pero ganamos honestamente”
Un análogo de esta expresión puede ser la frase: "Es imposible ganar dinero honestamente".
Con frases como estas convences a tu hijo de que el bienestar financiero sólo se puede conseguir de forma deshonesta.