Los padres experimentan emociones negativas cuando su hijo se niega a cumplir con sus solicitudes.
Cuando se encuentran en un estado de ira, rabia o confusión, las mamás y los papás suelen cometer errores.
Muy a menudo sale de boca de los padres la siguiente frase: “¡¿Cuántas veces puedo repetirte esto?!”
Esta pregunta retórica es muy estúpida. Es mejor nunca hacerle esta pregunta a su hijo o hija.
¿Qué hay de malo en esta pregunta?
El principal problema es que la frase “¿Cuántas veces puedes repetirla?” Es absolutamente inútil desde el punto de vista educativo.
Al escucharlo, el niño no querrá comenzar inmediatamente a obedecer a sus padres y cumplir con sus solicitudes.
Por el contrario, una pregunta retórica estúpida sólo provocará irritación en el niño.
Al fin y al cabo, la frase, más bien, es un reproche de mamá y papá a su hijo o hija.
En el mejor de los casos, el estudiante simplemente ignorará la queja de los padres. Y en el peor de los casos, dará alguna respuesta ingeniosa, por lo que los adultos se sentirán incómodos.
Y un niño muy pequeño e ingenuo que escucha la pregunta “¿Cuántas veces puedo repetir esto?” puede tomarlo en serio y sorprenderse de la “estupidez” de sus padres.