3 frases que pueden hacer que un niño odie a sus propios padres

07.07.2023 00:01

A veces basta una frase desafortunada para que los padres pierdan autoridad ante los ojos de su propio hijo.

Por tanto, las madres y los padres deben vigilar atentamente su discurso para no decir nada innecesario.

Hay tres frases que, al escucharlas, pueden provocar que un niño empiece a tratar peor a sus padres.

Este odio quedará en silencio. Y, sin embargo, no se puede permitir que se produzca una situación así.

"¡Deja de llorar!"

Es absolutamente normal que los padres tranquilicen a su hijo sin presentar ninguna queja contra él.

niño
Foto: © Belnovosti

Pero la situación sólo empeorará si mamá y papá intentan reprocharle al bebé las emociones que muestra.

Quizás después de la frase “Deja de llorar” el niño ya no llorará más. Pero es posible que empiece a acumular ira y odio en su interior.

Por eso, intenta ponerte en el lugar de un niño molesto y bajo ningún concepto lo regañes por llorar.

"Pero tu compañero de clase..."

Comparar a un niño con otros niños (y no a favor del propio hijo o hija) es una técnica muy peligrosa.

No hay que decirle a un niño que es malo en algo, pero que su compañero es bueno.

Es poco probable que tal afirmación aumente la motivación de un niño o una niña para estudiar. Pero un escolar bien puede sentirse ofendido. Convertirse también en dueño de una baja autoestima.

“No tendrás éxito. Prefiero hacerlo"

No hay nada terrible si un niño no logra realizar alguna acción simple la primera vez. Por ejemplo, es normal cepillarse los dientes, tender la cama o atarse los cordones de los zapatos.

Déle a su hijo la oportunidad de "practicar". No te burles de él ni le realices el procedimiento bajo ninguna circunstancia.

De lo contrario, un niño privado de la oportunidad de adquirir habilidades por sí solo puede desarrollar un odio silencioso hacia sus propios padres.

Antón Kurchev Autor: Antón Kurchev Editor jefe adjunto


Contenido
  1. "¡Deja de llorar!"
  2. "Pero tu compañero de clase..."
  3. “No tendrás éxito. Prefiero hacerlo"