Los dueños de gatos que ronronean saben de primera mano lo difícil que es lavar a un gato.
Durante el procedimiento, la mascota se asusta mucho y comienza a resistirse.
Mucha gente está segura de que el comportamiento de este gato se explica por su miedo al agua.
De hecho, al animal no le gusta tanto el líquido como la imposibilidad de adoptar una posición estable.
El fondo de la bañera es demasiado resbaladizo para el gato. A Fluffy le resulta muy difícil mantenerse de pie. Por eso el ronroneo entra en pánico.
Qué poner en el fondo de la bañera para que quede menos resbaladiza
Coloca alguna toalla vieja que ya no planees usar para el fin previsto.
Gracias a este producto, el gato podrá adoptar la posición más cómoda.
El animal se mantendrá firme sobre sus patas y ganará confianza en sí mismo: el miedo desaparecerá.
Utilice este truco y verá que su ronroneo se comportará con mucha más calma.
Lo más probable es que no haya problemas para bañar al animal: es poco probable que un animal peludo cuyas patas se resbalen muerda o arañe.