A pesar de que el gato vive con una persona bajo el mismo techo desde hace varios milenios, no se pueden explicar todos sus hábitos y rarezas.
Hasta ahora, en el mundo humano este animal está asociado con la independencia y el misterio.
Aquí hay algunos datos que sorprenderán incluso a los amantes de los gatos experimentados.
1. Todo el mundo sabe que un gato es un animal depredador. Pero no sólo caza para alimentarse a sí misma o a sus crías.
El animal no es reacio a divertirse y, a menudo, persigue a su presa únicamente por placer o para mostrar atención al dueño presentándole la presa como regalo.
2. Los gatos que viven al aire libre tienen hipermetropía por naturaleza. Se cree que esta característica les ayuda a sobrevivir en la naturaleza.
3. La opinión sobre la capacidad de un animal para ver en la oscuridad es algo exagerada.
En realidad, el ojo del gato ve con mayor claridad en el crepúsculo y en la oscuridad, pero el animal tiene bigotes con los que puede identificar los objetos localizados.
4. A muchos gatos les encanta la leche condensada, pero esto no significa que al animal le gusten los dulces. Simplemente no.
Los receptores de la lengua del gato no detectan este sabor en absoluto, así lo ordenó la naturaleza.
5. Hay razas de gatos que no son inferiores a los perros en lealtad y devoción a su dueño.
Además, la inteligencia de un gato no es inferior al coeficiente intelectual de un perro y el animal puede ejecutar órdenes y trucos con el mismo éxito.
Lo que pasa es que los perros y los gatos tienen actitudes diferentes hacia las personas.