En general, se acepta que los gatos, a diferencia de los perros, no saben apegarse a sus dueños.
Esta es una idea errónea. De hecho, un ronroneo bien puede enamorar a una persona y acostumbrarse a ella.
Es solo que un gato no mostrará su afecto de manera tan brillante y emocional como un perro.
¿Aún no estás seguro de que el peludo te quiera?
Entonces solo mira la cola de tu mascota maullando.
Es este apéndice móvil el que es un "indicador" del estado de ánimo de la mascota y su actitud hacia la persona que está cerca.
Cómo un gato al que no le gusta su dueño mueve la cola
Una mala señal son los movimientos bruscos de un lado a otro, informa AQUÍ NOTICIAS .
Este fenómeno sugiere que al gato no le gusta la persona que está a su lado.
Se puede llegar a una conclusión similar si el apéndice es esponjoso.
La posición de la cola de un gato que ama a su dueño
Pero una cola relajada y levantada indica que la mascota trata bien a su dueño.
Por ello, intenta prestar siempre atención a la cola de tu gato cuando te acerques a ella (o, por el contrario, cuando el animal se acerque a ti). Después de todo, así comprenderás cómo cambia el estado de ánimo de tu amigo de cuatro patas y su actitud hacia ti.