Los perros perciben las emociones y el estado de ánimo humanos de forma más aguda que otros animales. Sin embargo, esta idea no describe completamente la conexión emocional entre un perro y su dueño.
Según los últimos datos, si el dueño de un perro se deprime, su mascota no podrá disfrutar de la vida por mucho tiempo.
Así lo informó News.ru con referencia a una publicación en la revista científica Scientific Reports.
Los científicos han llegado a la conclusión de que los perros sienten con mucha sensibilidad el estado emocional del dueño.
Entienden perfectamente cuando una persona está de buen humor.
Y ellos también sienten estrés. Además, lo determinan por el olfato.
Como resultado, el estrés y la depresión de una persona pueden transferirse al perro.
En este caso, las mascotas se vuelven inquietas y su comportamiento se vuelve alarmante. Todo esto puede resultar en depresión para el perro.
Los expertos también concluyeron que cuando los perros huelen el estrés, dudan de que puedan ayudar y ser útiles a su dueño.