Independientemente de si el pelaje de un gato es largo o corto, no se debe recortar.
El cuidado de un animal incluye el aseo adecuado. Los representantes de las razas de pelo largo deben peinarse al menos tres veces por semana, mientras que las razas de pelo corto solo una vez.
El lavado se realiza a medida que el animal se ensucia.
Un gato debe ser cortado sólo en dos casos.
Así, este procedimiento está indicado si tu mascota presenta enfermedades de la piel, como heridas supurantes o úlceras, cuando el pelaje dificulta la aplicación de ungüentos y remedios medicinales.
En caso de enfermedad se debe consultar a un veterinario.
La segunda situación en la que un corte de pelo es aceptable es la aparición de enredos descuidados en el pelaje, que pueden provocar la formación de una "cáscara", irritación de la piel y malestar al moverse.
Es lógico que los gatos de pelo corto se enfrenten con menos frecuencia al problema de las esteras que los gatos de pelo largo.
Anteriormente BelNovosti informó que muchos dueños novatos de gatos hacen las cosas mal.