El perro no debe convertirse en el miembro principal de la familia.
Es malo cuando una mascota comienza a "controlar" a su dueño, mientras demuestra absoluta impotencia en muchas otras áreas.
Un perro mimado es muy difícil de alimentar y adiestrar adecuadamente.
Pero, ¿cómo puedes saber si estás criando mal a tu amigo de cuatro patas? Hay tres señales claras.
El perro no quiere comer del plato.
Quizás la principal prueba de deterioro sea el deseo del perro de comer alimentos únicamente de las manos del dueño.
Un perro así está seguro: la comida humana es más sabrosa que la de su plato.
El perro tira constantemente de la correa.
Si comienza a parecer que no es el dueño quien pasea al perro, sino el perro quien pasea al dueño, entonces esta es una muy mala señal.
Si el paseo siempre sigue la ruta elegida por el perro, entonces es necesario tomar medidas.
No le des demasiada libertad a tu amigo de cuatro patas y no cedas ante tu mascota si empieza a tirar de la correa.
El perro ladra a menudo.
Una mascota está claramente malcriada si empieza a ladrar en cualquier situación que no le guste.
El perro debe reaccionar con calma ante la negativa del dueño a jugar con él. No debería haber ninguna reacción incluso si la persona sale de la habitación.
Anteriormente, los expertos dijeron cómo entender que un perro carece de actividad física.