Por qué un perro ladra a algunas personas y a otras no: qué extraños considera peligrosos el animal - 5 señales

08.03.2024 15:36

Muchos dueños de perros han notado durante mucho tiempo lo siguiente: durante los paseos, la mascota ladra a algunas personas e ignora a otras.

¿Por qué tu amigo de cuatro patas se comporta así?

La respuesta es sencilla: el perro percibe a los transeúntes de forma diferente. El perro no considera peligrosas a muchas personas y, por lo tanto, no reacciona ante ellas de ninguna manera.

Al mismo tiempo, hay quienes el animal considera una fuente potencial de peligro. ¿De qué tipo de personas estamos hablando exactamente?

Personas cuyo rostro está “cerrado”

Un perro puede reaccionar negativamente ante una persona que lleva gafas de sol o una mascarilla médica.

perro
Foto: © Belnovosti

A menudo los perros se preocupan cuando ven a un hombre barbudo.

gente alta

Un amigo de cuatro patas puede comenzar a comportarse agresivamente si hay una persona alta cerca.

¿Por qué a los perros no les gustan las personas altas? El hecho es que parecen demasiado inusuales para los animales: aparece un sentimiento de ansiedad.

gente que habla en voz alta

Los perros se irritan mucho con los ruidos fuertes. Por eso, intenta hablar en voz baja o permanecer en completo silencio cuando pases junto al perro.

Personas que miran directamente a los ojos de un perro.

Muchas mascotas perciben la mirada directa como una amenaza grave.

Amantes de la perfumería y los desodorantes

No es ningún secreto que los perros tienen un olfato muy desarrollado.

Tenga esto en cuenta al utilizar perfume, colonia y desodorante. Es posible que a un animal no le guste un olor demasiado fuerte.

Anteriormente, los expertos describieron cómo los perros sienten la inminente llegada de su dueño a casa.

Antón Kurchev Autor: Antón Kurchev Editor jefe adjunto


Contenido
  1. Personas cuyo rostro está “cerrado”
  2. gente alta
  3. gente que habla en voz alta
  4. Personas que miran directamente a los ojos de un perro.
  5. Amantes de la perfumería y los desodorantes