Cada año, a finales de diciembre, los gatos y los gatos tienen una gran oportunidad de trepar a los árboles sin salir del apartamento.
Como dice el refrán, “a quien no se le ha caído el árbol de Navidad”, pero los dueños de gatos conocen de primera mano esta desgracia y, además de luces y juguetes, preparan adornos de otro tipo.
A continuación se ofrecen algunos consejos prácticos.
Consejo primero, da miedo.
No hay nada más fácil que colocar al lado del árbol de Navidad un objeto que provoca horror sagrado, convulsiones y ataques de pánico en un gato.
Para la mayoría de las mascotas, se trata de una aspiradora. Algunos dueños de gatos temen el secador de pelo de su dueño.
Si deja electrodomésticos junto al árbol de Navidad, su mascota no se acercará y es poco probable que se muestre en la habitación.
Consejo dos, pegajoso
Sin embargo, celebrar el Año Nuevo con una aspiradora, incluso disfrazada de regalo de Año Nuevo, sigue siendo un placer.
Puede extender película adhesiva o cinta adhesiva (con el lado adhesivo hacia arriba) debajo del árbol. A los gatos no les gusta que las cosas se les peguen por razones que desconocen.
Por cierto, si está acostumbrado a colocar un árbol de Navidad natural, será más fácil quitar las agujas que caen después de las vacaciones: simplemente enrolle la película.
Consejo tres, fragante
A los gatos no les gusta el olor de las frutas cítricas y es difícil imaginar el Año Nuevo sin el olor a mandarinas. Las cáscaras de cítricos debajo o encima del árbol no estropearán el ambiente festivo.
También puedes utilizar sprays para tratar muebles y alfombras para evitar que las mascotas los arañen con sus garras.