Muchos gatos son conocidos por su comportamiento conservador y quisquilloso: les encanta comer, pero al mismo tiempo son selectivos con la comida.
A menudo ignoran los alimentos nuevos y se niegan a comerlos durante un período de tiempo relativamente largo.
Pero a veces ocurre la situación opuesta: la mascota continúa absorbiendo alimentos con una actividad excesiva.
Cualquier desviación de la norma debe considerarse motivo de preocupación.
¿Por qué mi gato comió demasiado?
Aquí hay algunas posibles razones.
- Contenido calórico o peso del pienso. La densidad y el contenido calórico del pienso pueden variar, ya que en la producción se utilizan diferentes componentes.
- Esterilización. Un gato puede comer mucho durante algún tiempo después de la esterilización; este procedimiento afecta el trasfondo hormonal general.
- Gusanos. Los gusanos pueden ayudar a tu gato a comer, y ante la más mínima sospecha debes contactar con tu veterinario.
Si observa una desviación de la norma, es mejor contactar a un especialista con anticipación.