Los gatos pueden brindar mucha alegría y placer a sus dueños.
Pero a veces también pueden causar muchos problemas, especialmente cuando rayan sofás y otros muebles. ¿Por qué los gatos hacen esto y cómo destetarlos de este mal hábito?
Razones para rayar los sofás
Hay varios motivos por los que los gatos arañan los sofás y otros objetos de la casa. Éstos son algunos de ellos.
Marcado de territorio
Los gatos tienen glándulas especiales en las almohadillas de sus patas que liberan un olor cuando rascan una superficie.
De esta forma, dejan su “firma” en su territorio y les dicen a otros gatos que les pertenece.
cuidado de uñas
Los gatos renuevan periódicamente sus garras, eliminando viejas capas de materia córnea. Al rascar los sofás, se ayudan a sí mismos a deshacerse del exceso de material y a mantener sus garras afiladas y sanas.
Distensión muscular
A los gatos les encanta estirarse y relajarse después de dormir o permanecer en una posición durante mucho tiempo. Al rascar los sofás, estiran los músculos de la parte delantera y trasera y también se masajean las patas.
Expresar emociones
Los gatos pueden arañar los sofás cuando están estresados, aburridos, irritados o felices. De esta forma alivian el estrés, se entretienen o demuestran el amor por su dueño.
Formas de evitar que los gatos arañen los sofás
Rascar los sofás no sólo puede resultar desagradable, sino también costoso para los dueños de gatos, ya que puede dañar los muebles y arruinar el interior. ¿Cómo destetar a los gatos de este hábito? A continuación se ofrecen algunos consejos.
Proporcione a su gato un rascador
Un rascador es un artículo especial que está diseñado para que un gato pueda rascar sin dañar los muebles.
El rascador debe ser estable, alto y revestido con un material que le guste al gato, como sisal, alfombra o madera.
El rascador debe colocarse en un lugar conveniente para el gato, por ejemplo, al lado del sofá, la ventana o la cama. También puedes hacer que un rascador sea más atractivo para tu gato rociándolo con hierba gatera o colgando juguetes en él.
Distrae a tu gato del sofá
Si notas que tu gato está a punto de arañar el sofá, intenta distraerlo de otra forma.
Por ejemplo, puedes jugar con ella, darle un premio, elogiarla o acariciarla. De esta forma, le demostrarás a tu gato que hay cosas más interesantes y divertidas que hacer que rascar el sofá.
Haz que el sofá sea desagradable de rayar
Puedes intentar hacer que tu sofá sea menos atractivo para rascarte utilizando una variedad de productos.
Por ejemplo, puedes cubrir el sofá con una manta, papel de aluminio, film u otro material que no le guste al gato.
También puedes utilizar repelentes especiales que emiten un sonido, luz u olor cuando el gato se acerca al sofá.
Sin embargo, no olvides que estos productos deben ser seguros para el gato y no causarle dolor ni miedo.