Aquellos que quieran probarse a sí mismos como dueños de un hurón primero deben familiarizarse con los requisitos que estos indudablemente lindos animales "presentan" a su dueño y hábitat.
Entonces, en primer lugar, a los hurones les encanta el espacio. Mantener a una mascota así en una jaula de forma permanente es cruel con la mascota.
Tu hurón necesita poder caminar mucho, y si le permites hacerlo en tu apartamento, tendrás que cuidar de su seguridad.
Guarde los productos químicos domésticos, los cables y otras cosas que puedan dañar a su mascota o que le sean queridas.
Además de caminar por el apartamento, la vida de un hurón debe incluir paseos al aire libre.
Es cierto que este pasatiempo también tiene sus propios peligros, por ejemplo, la posibilidad de infección por parásitos, así que no te olvides del tratamiento regular de tu mascota.
Además, una “etapa” importante en el cuidado de una mascota es la vacunación.
Los hurones necesitan vacunas periódicas contra el moquillo y la rabia.